TALA





De fuera hacía dentro, como una cebolla o, como un árbol. Talamos lo visible en su orden fragmentario para llegar al núcleo marcado por una constante de-apertura cognitiva. El conocimiento absoluto parece una tarea imposible por su ilimitado revelador.

Esta obra se dispone en el suelo y sobre ella se proyecta el reflejo de un tubo de neón suspendido del techo, instalado a unos metros de ésta. El bastidor esta entelado con PVC negro, lo cual favorece el reflejo blanco. Esta proyección se confunde y, por lo tanto contribuye a visibilizar el diálogo entre lo matérico y lo inmaterial. Los límite de lo propiamente pictórico se cuestionan en esta incertidumbre representativa, desde materiales y formatos tradicionalmente pictóricos. Valga mostrar lo producido como soporte y ampliación de lo narrativo (Y es que acompañar los hechos a las palabras a mi modo de ver es lo más honesto que puedo ofrecer.).

Se abren puertas, al mismo tiempo que abrimos la cebolla o, se aporta conocimiento al ver lo que esconde un árbol, al ser talado. Mis proyectos están caracterizados entre ellos por la ruptura, al igual que la tala, busco ampliar el espacio mental, la experiencia visual.


Rubén M. Riera  06/2015








Tala, 2016
Acrílico sobre PVC sobre 2 bastidores de 100x81 cm y reflejos de neón.

Instalación. Medidas variables












Photo: Alejandro Cinque & Arantxa Boyero